Dentro de tres días mi compañera Caterina y yo emprenderemos la que va a ser, sin duda, la experiencia de nuestras vidas. A esta historia se unirá Rosa más adelante, otra compañera de esta aventura. Ahora mismo me encuentro algo incrédula, no soy todavía consciente de que ya mismo me voy lejos de casa, a explorar una nueva ciudad y a conocer a las personas que serán, seguramente, mi familia durante dos meses. Tengo que decir que da un poco de miedo, pero la ayuda que nos ha aportado la OCDS, así como el contacto que hemos podido mantener con Alcudia Solidaria, ha hecho que los preparativos sean mucho más fáciles y que los nervios estén más destinados a la incertidumbre y la ilusión que no a dificultades para tenerlo todo listo.
Mis sensaciones son muchas y van cambiando de manera constante, tengo muchísimas ganas de comenzar con esta experiencia para volver siendo una persona totalmente renovada y para dar lo mejor de mí, aunque estoy segura de que aprenderé yo mucho más de las personas que me cruce en este camino que ellas de mí.
Lo único que queda por preparar antes de irme el sábado es la maleta y, por supuesto, la familia, ellos son los que más tiempo y dedicación necesitan ahora que me voy a ir tanto tiempo fuera de casa. Por lo demás… 3, 2, 1… En breve, os escribo desde PERÚ!
NeusDiéguez.